Después de ocho meses de reclusión en el centro penitenciario del Altiplano ubicado en Almoloya de Juárez en el Estado de México, Ovidio Guzmán López, alias "el ratón", fue extraditado a los Estados Unidos donde enfrentará cargos por narcotráfico y envío de precursores químicos  desde Asía para la fabricación de fentanilo que en la Unión Americana ha cobrado miles de víctimas.

El fiscal general de EU, Merrick Garland, confirmó la extradición del hijo de "el Chapo" Guzmán y agradeció el trabajo de sus contrapartes del gobierno mexicano. Después de los exámenes de salud y los trámites correspondientes, Ovidio fue ingresado al centro penal de Chicago.

Como se recordará, fue el 17 de octubre de 2019 cuandio Ovidio fue capturado por primera vez en Culiacán, Sinaloa, por fuerzas federales, pero el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó al Ejército su liberación para salvar vidas ante la violenta reacción del cártel de los chapitos contra militares y civiles. "Evitamos muchas muertes", dijo el mandatario en esa ocasión. Posteriormente, en enero pasado, Ovidio fue recapturado luego de un fuerte operativo a las afueras de la capital sinaloense que también generó reacciones pero se pudo lograr el traslado del objetivo al penal de Almoloya hasta ayer que fue trasladado a Chicago.

La Casa Blanca y el fiscal Garland agradecieron a las autoridades mexicanas la extradición de Ovidio Guzmán, requerido por varios cargos entre ellos asociación delictuosa, aunque también lo requieren en Nueva York y Washington DC por más denuncias en su contra, confirmó el fiscal general de EU, Merrick Garland.

Por su parte, la asesora de Seguridad de la Casa Blanca, Elizabeth Sherwood-Randall, agradeció a las autoridades de México por la extradición del hijo de El Chapo Guzmán a los Estados Unidos.

Guzmán fue notificado de su extradición al mediodía de ayer en su celda del penal de máxima seguridad de El Altiplano, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México, y fue extraído en helicóptero desde el centro penitenciario.

En Chicago, el hijo de El Chapo enfrenta cargos por asociación delictuosa para tráfico de drogas a gran escala y a largo plazo, como cabecilla del Cártel del Pacífico.