Caballo Cultural

Por Pedro Félix Gutiérrez 

LA URBANIZACIÓN DE LA CIUDAD DE MÉXICO

Un día los mexicanos de todo el país nos dimos cuenta que teníamos además de los diez mil kilómetros de litorales, de la flora y la fauna más diversa y original del mundo, la ciudad más grande del planeta que es la Ciudad de México.

Enorme e histórica concentración de poder, historia, cultura y sociedad. La representación del país llamado México que resurge de sus destrucciones y siempre logra una resurrección siempre vital, alegre, trágica y finalmente sólida y canta.

"Mi ciudad es chinampa en un lago escondido/ es zenzontles que busca en dónde hacer nido/rehilete que engaña la vista al mirar...".

Y es que cuando ellos llegaron, el imperio azteca que dominaba todas las tribus del Valle de México era único, poderoso y fuerte.

Una gran cantidad de historiadores, profesores universitarios, investigadores de arqueología y antropología han dado cuenta de la magnificencia y esplendor de la gran Tenochtitlán, sitio originalmente prehispánico donde se sienta la capital de un país llamado México. El ombligo del mundo.

Las puertas luminosas entre el polvo de los siglos más de quinientos años recuerdan a Cholula y Teotihuacan, las culturas originarias: olmecas, mayas, toltecas y al último rey Tlatoani literato, el poeta Netzahualcóyotl.

Cuatro grandes fases presentan la historia de la Ciudad de México y múltiples variantes. La primera de sus señoríos naturales y fundación en un simbolismo espléndido entre el águila y la serpiente, hasta el último de sus emperadores aztecas. Otro momento es la conquista, los españoles venidos a menos y aventureros que con colón llegaron a América.

El primer mestizaje ya nada fue igual, una nueva raza, la discusión y polémica, la lucha de Independencia que separó al país del reinado, luego la constitución de la República y la guerra de la Revolución hasta el México de 1920 posrevolucionario.

Así después de 1910, ya en el siglo XX, empieza la alta concentración de población en la zona metropolitana. La migración interna y el crecimiento de la Ciudad de los Palacios, el templo de San Francisco frente al restaurante de los azulejos que fue edificado tres veces

Esta ciudad en su urbanización fue descrita como " la más popular y noble de más autoridad en toda Nueva España, la mayor cumbre de grandeza que han visto pasados y presentes renovandose permanentemente,como una belleza que arde,con los portales de sus templos llenos de esculturas,labradas con sutiles formas y sus torres majestuosas que besan el cielo.

En esta ciudad la ilustración que marco el sueño barroco y en dónde el neoclásico se encargó de reunir en su mínima expresión obras de arte de los siglos; XVI Y XVIII, fue la ciudad primera en hidpanoamerica en recibir el impacto de la" bella forma" académica,en ella se fundó la academia de San Carlos,la del estudio de las bellas artes más antigua de América.

El neoclásico y la consolidación del proyecto liberal - ya habían sido expulsados los jesuitas - y saqueados sus templos y lugares sabemos por eso de San Fernando que habitaron los misioneros que evangelizaron Texas y la baja California.

En el centro de la ciudad podemos ver las casas que dejó el Virreinato y que el porfiriato disfrazó de residencias afrancesadas; sigue la canción: "baila al son del tequila y de su valentía/ es jinete que apuesta la vida/ en un lienzo de fiesta y color"/

México Distrito Federal, una ciudad donde pactan la luz y el viento, lo que significa disfrutar ahora de una ciudad de nuestro tiempo, con espacios indígenas en su centro histórico, el Templo Mayor, la Catedral metropolitana, el Palacio Nacional y sus espléndidos murales, o el edificio de su honorable Ayuntamiento.

La gran ciudad que dibujó el conquistador Hernán Cortés de Monroy y Pizarro Altamirano en su segunda carta de relación a los reyes de España. Uno de los relatos más valiosos de todos los tiempos o bien la reseña de Bernal Díaz del Castillo, que el Siglo XVI estacionó, "pues entre nosotros hubo soldados que estuvieron en Constantinopla, en toda la Italia y Roma y dijeron que plazas y jardines, canales, acueductos, puentes, mercados y templos acompañados, no habían visto jamás".

Ver la Ciudad de México es estar en los siglos XVII Y XVIII, la ciudad de los conquistadores, la ciudad barroca, las construcciones de las órdenes monásticas, templos, iglesias, capillas y conventos de indudable valor como por ejemplo el de Santo Domingo, sus portales, el territorio donde alguien te escribe una carta. Su impresionante Iglesia mudéjar, un estilo artístico que se desarrolló en los reinos cristianos de la península ibérica y que incorporaba influencias, elementos o materiales de estilo hispano-musulmán. Los españoles también fueron conquistados por los árabes ochocientos años y aquí se refleja su influencia. Cantemos: 

"Mi ciudad es la cuna
De un niño dormido
Es un bosque de espejos
Que cuida un castillo,
Monumento de gloria que vela su altar
Es un sol con penacho y sarape veteado
Que en las noches se viste de charro
Y se pone a cantarle al amor".

Existen ahora tres ejes que nos cuenta González de León San Juan de Letrán o niño perdido, ahora Eje Central, Juárez-Reforma, de impresionante belleza e insurgentes, donde los barrios del porfirismo alto y medio de mezclan en el arte Noveau y el arte Deco y el colonial importado de Los Ángeles, California.

El centralismo político y la concentración de las desiciones en un sólo espacio, la convierten en la ciudad de mayor concentración del país. México deja de ser rural para convertirse en un país urbano con todas sus consecuencias.

Existen ahora grandes puntos urbanos donde se refleja el hombre de nuestra época, las vías rápidas, el metro, los centros de negocios, los grandes espacios culturales, el arte pop, el constructivismo y las áreas de crecimiento espontáneo, -barrios miserables- y jactancioso.

Sus mercados y sus mezclas que iluminan la vista, abren el apetito, sacian el hambre, hacen cantar al corazón, existen guisos de aire, mar y tierra.

De los cinco lagos que había en su fundación. sólo queda Xochimilco, el enorme parque de Chapultepec y sus ahuehuetes envejecidos por el humo; ahí adentro la gratísima presencia del Museo Nacional de Antropología e Historia que dio pauta a la exposición que recorrió el mundo: "México esplendor de cinco siglos".

Sueño de una tarde de domingo en la Alameda es un mural de Diego Rivera, obra al fresco que relata la historia de México de los siglos XVI al XX, con una pléyade de personajes mexicanos, que luego retratan los Beatles en la portada de su disco Sgt. Pepper´s Lonely Heart Club Band, con sus propios iconos en ese entorno onírico que es la memoria.

Bellas Artes es el proyecto de Balmori iniciado en 1904, mezcla de arte Noveau y arte Deco en marmol blanco de Carrara Italia, también negro, amarillo y rojo en su interior. Es una sinfonía escultorica, el grupo central, la armonía representada por una mujer rodeada de los estados del alma musical. El dolor, la ira, la alegría, la paz y el amor. En su interior los murales de Orozco, Rivera y Siqueiros. La primera vanguardia artística mexicana en el México posrevolucionario que fue el muralismo.

Cerca de ahí paseando, el Museo del Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanas, el Museo del Telégrafo, el Museo Nacional de Arte, el Palacio Cultural de Banamex, el Museo y Biblioteca de Filatelia, tesoro de coleccionistas, el Teatro Blanquita, escenario de vodeviles y carcajeantes obras. La Plaza del Mariachi y ya de regreso a la Alameda, el Teatro Hidalgo, el Museo Franz Mayer instalado en lo que fue el templo de San Juan de Dios.

"Por las tardes con las lluvias se baña su piel morena/y al desatarse sus trenzas/ sus ojos tristes de cierran.../ " Ahora no, ahora es la ciudad que no duerme. Existen rincones en el mundo, Amsterdam, Estambul, Montreal, Sidney, Argel, Atenas o Río de Janeiro, New York y Los Ángeles, pero la Ciudad de México, capital del Imperio Azteca, es única para ver, amar disfrutar y saborear su destino. Ver y enseñar a ver para dejar atrás la infancia espiritual.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP

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