Ajedrez Huasteco

Por Jesús Sierra

REGLAMENTOS EN DESUSO

Muchos reglamentos municipales han sido promulgados a través de los años en los municipios de la zona Huasteca. La mayoría de ellos atendiendo a las instrucciones de normatividad, más que buscando favorecer las necesidades de la población. Hay ordenamientos para casi todo, desde reglas de tránsito, uso de vehículos oficiales, ecología, mercados, bandos de policía, entre muchos otros. La característica que los distingue a la mayoría de ellos es que no se cumplen y no se sanciona a quienes los violentan.

Hoy me referiré a un ordenamiento promulgado en Ciudad Valles en particular, cuyo rimbombante título no ha servido de mucho para efectos prácticos; se trata del Reglamento para regular el servicio de estacionamiento en la vía publica controlado por parquímetros multiespacio. Fue publicado en una edición extraordinaria del periódico oficial del estado, el jueves 19 de diciembre del año 2013, a propósito del inicio de operaciones de los parquímetros que se colocaron en la zona centro de Valles, durante la administración municipal de Juan José Ortiz Azuara.

Dos de sus artículos, el 19 y el 20, que les comparto a continuación, resultan hoy de toral importancia debido al desmedido crecimiento del parque vehicular de vehículos de dos ruedas que adivino mi estimado lector, tampoco se aplican.

ARTÍCULO 19.- Por ninguna circunstancia se permitirá a persona alguna, colocar objetos en la vía pública, en las áreas o zonas controladas por parquímetros, con el fin de reservar dichos espacios.

ARTÍCULO 20.- En los lugares y espacios donde se encuentre permitido el estacionamiento regulado por parquímetros no se permitirá el estacionamiento de motocicletas, bicicletas, triciclos, carros de mano, remolques y otros de tracción no mecánica.

En la zona de los tres mercados que hay en la ciudad se instalaron parquímetros. Todos los días, sin embargo, comerciantes establecidos y no establecidos, principalmente, separan espacios de estacionamiento en la vía pública con cajas, diablitos, cubetas y demás objetos. Nadie, absolutamente nadie que represente a algún órgano de autoridad, hace algo al respecto y la anarquía en esta zona tan importante para la ciudad opera desde su instalación y hasta nuestros días.

Luego, en las calles de la zona centro, como así las conocemos en este Valles de mis quereres, se puede ver a muchas motocicletas estacionadas en los espacios destinados a los vehículos de cuatro ruedas, si, esos que si no pagan el parquímetro, con una eficiente en chinguisima, les ponen la famosa araña y entonces tienen que pagar una multa para que se las retiren.

Las motocicletas, por otro lado, gozan del privilegio de estacionarse en paralelo a la banqueta, en diagonal, sobre ella, ocupando uno o dos espacios, vaya, como les de su regalada gana, y tampoco en este caso hay algún órgano de autoridad que haga cumplir lo dispuesto en el artículo 20 del pomposo reglamento.

Muchos ayuntamientos de la entidad se volvieron aficionados a redactar reglamentos, la mayoría por la vía del copy paste, pero renuentes a encargarse de que sus disposiciones se cumplan, pues si algo sale mal, siempre habrá la estoica salida de organizar algunas mesas de negociación para “llegar a acuerdos” con quienes se encuentren inconformes, en este mi lindo y querido México mágico en el que nos tocó vivir.

Así las cosas.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP.

Anteriores