Ojo de Buey

Por J. Carlos Haro

La candidez del Frente Amplio Potosino

Este jueves 27 de julio se formalizó el comité potosino del Frente Amplio por México, el membrete diseñado por Claudio X. González para aglutinar a la derecha partidista y la “sociedad civil” con el propósito de impedir el próximo año la consolidación del poder de la izquierda que encarna Morena y los aliados de la Cuarta Transformación.

 

Fue un evento desabrido, carente de ideas, emociones y entusiasmo, parecía un velorio, asistió poca prensa y la presentación estuvo a cargo de las dirigentes del PAN y PRI, Verónica Rodríguez y Sara Rocha, cuyos liderazgos flotan en el aire por su desentono con la realidad, administran partidos en crisis y cada vez con menos militancia; son figuras decorativas, detrás de ellas están el diputado Xavier Azuara y el diputado y líder nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno.

 

También estuvo representado el PRD, una momia insepulta, sin registro y nula presencia, ni siquiera le dieron el uso de la voz a su delegado por su insignificancia;  por el PRI, se mencionó al exrector de la UASLP y exalcalde capitalino, Mario García Valdez, un cartucho quemado del que ya nadie se acuerda, frívolo e intrascendente, lo que reafirma la falta de sustancia y extravío del conservadurismo potosino al reciclar a este tipo de personajes que no aportarán más que pena ajena.

 

Esta percepción sombría que se impone sobre el comité potosino del Frente Amplio por México, se refuerza con su componente de la “sociedad civil”: Alberto Narváez Arochi, un comerciante zapatero vinculado al PRIAN y que encabeza marchas contra la inseguridad por la avenida Carranza con el disfraz de “ciudadano comprometido” y ajeno a partidos, cuando solo defiende los intereses de las élites económicas.

 

Hay otros integrantes con un mismo común denominador que los descalifica para impulsar una alternativa real: su paso oscuro por gobiernos priistas, panistas y navistas de ingrata memoria, como Alejandro Lafuente Torres, Fuensanta Medina Martínez y José Manuel Aranda Gómez, su motivación principal para figurar ahora es su añoranza por los privilegios de estar en la nómina.

 

No aparecieron empresarios de peso, líderes sociales, nuevas caras, sino pura morralla del sector privado y no se ve que vayan a surgir “candidatos ciudadanos” con arrastre; resulta difícil imaginar a Narváez Arochi y otros empresarios anti-AMLO como Héctor D’argence y Amparo Rosillo compitiendo por una diputación local o federal, las campañas electorales cuestan mucho dinero y no piensan gastar de su bolsa ni un centavo; Rosillo, por ejemplo, está por cerrar la centenaria librería Española.

 

Este nada prometedor escenario de la derecha potosina, candorosa y sin brújula, puede ayudar a explicar la embestida de la ultraderecha que encabezan Eduardo Verástegui y Gilberto Lozano contra el Frente Amplio por México y su virtual candidata Xóchitl Gálvez, porque solo parecen facilitar que la 4T vaya a ganar de calle las próximas elecciones.

 

GOVEA CON EBRARD

 

Eugenio Govea es un chaquetero de la política, su ideología es el dinero, logró acumular una fortuna sin mucho esfuerzo; casado en segundas nupcias con la hija de la exgobernadora de Zacatecas, Amalia García, se hizo en el PAN y cuando le dieron un portazo a su ambición de ser candidato a la gubernatura se fue a Movimiento Ciudadano, al que regenteó durante muchos años sin ningún crecimiento, salvo para sus ingresos, acaparó las diputaciones plurinominales, el partido nunca ganó distritos ni alcaldías, hasta que fue echado por Dante Delgado ante el arribo de prianistas como Marco Gama, Josefina Salazar, Mauricio Ramírez y navistas de nueva generación como Sebastián Pérez, el hijo espiritual de Tomás Calvillo.

 

Govea ya hizo oficial su ruptura con MC y su adhesión al proyecto de Marcelo Ebrard, la corcholata más conservadora de la 4T, proviene de la corriente camachista-salinista, por eso despierta más simpatías fuera de Morena y se le suman sobre todo los desechos del PRI, como Salomón Rosas y otros impresentables que abusaron del erario estatal. Los desplantes forman parte de la personalidad de Govea, ya se ostenta como el coordinador de la campaña de Ebrard en San Luis Potosí, pero se le puede atravesar el exgobernador Fernando Silva Nieto.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP

J. CARLOS HARO

jcarlosharo@gmail.com

Sin títulos nobiliarios ni académicos. Simplemente un libre pensador en el pueblo