DESDE ULTRATUMBA HORACIO LE JALA LAS PATAS AL GALLARDISMO CON UN "TESTAMENTO POLÍTICO" LEÍDO POR CONCHALUPE EN EL PRI

¡Para Ripley! Concepción Guadalupe Nava, viuda de Horacio Sánchez Unzueta, leyó ayer en el PRI el "testamento político" de su marido en el cual critica fuertemente el estilo actual de gobernar de Ricardo Gallardo Cardona, "uno de los ejemplos más vergonzosos y siniestros a la vista, de los que no sirven para explicar cómo se llega a la máxima responsabilidad pública de nuestro estado".
Es el segundo testamento político que lee en público la señora Nava Calvillo. El primero fue el de su padre, el doctor Salvador Nava Martínez, el 17 de mayo de 1992, cuando el agonizante líder civilista pedía establecer un diálogo nacional sin exclusiones para alcanzar la democracia del país. Fue el famoso discurso del reloj político tiene las horas contadas.ç
Lo contradictorio del caso es que ahora Conchalupe hizo la lectura del nuevo testamento del horaciato ¡en el mismo PRI que le negó a su padre la candidatura a la gubernatura, lo reprimió, lo metió a la cárcel y le cometió fraudes electorales! El mundo al revés. El Dr, Nava ha de estar revolcándose en su tumba en El Saucito.

En este segundo testamento político leído en el auditorio Plutarco Elías Calles del PRI, Sánchez Unzueta cuestionó cómo motivar a recorrer caminos de sacrificio, de estudio y de honradez, perseverancia y altitud de miras para servir a los semejantes en un puesto público, en las actuales circunstancias.
Preguntó cómo educar a los jóvenes y niños en los contenidos de la ética política y de la integridad personal para ganar la confianza y el respeto de los demás, y merecer así su voto. También cuestiona cómo explicar el ejercicio de la política como medio democrático para ganar elecciones, si ahora las voluntades se compran con dinero ilícito a manos llenas.
¿Quiénes son ahora los modelos a seguir y cuáles son las cualidades y prendas personales para aspirar a gobernar a los potosinos algún día por venir, y qué decirles a las nuevas generaciones cuando las elecciones no son un triunfo de la razón democrática, sino del engaño de los influencers, la extorsión y las dádivas en efectivo?, objetó.

También Horacio dejó abierta la pregunta de cómo advertir a los jóvenes que las ofertas anticorrupción y los “Dios te bendiga” intermitentes son una mentira hipócrita y desalmada, y cómo recomendar a los niños y jóvenes emular a quienes roban, amenazan, despojan, intimidan, manipulan, injurian o se enriquecen con los fondos públicos y las extorsiones inmobiliarias.
Criticó con dureza también aquellos que fingen "empresas fantasma” y que corrompen a través de promesas de fácil enriquecimiento, o de un cargo público a las élites económicas y políticas San Luis y otros lados, y que suelen ser violentos y han descubierto y experimentado que ocupar puestos públicos potencia desmesuradamente sus ambiciones de enriquecimiento y vanidad, también de impunidad. Criticó a quienes además se sirven de organizaciones criminales “de aquí y de allá”, lo cual se lee como una declaración de guerra contra el gallardismo desde ultratumba.

En la carta mortuoria manifestó que sentía pena y profunda tristeza porque no encontró qué decirles a los niños y jóvenes de San Luis Potosí. Aseguro que quienes son hoy complacientes y se rinden por miedo o ambición, pagarán los dividendos del naufragio que viene.
En una serie de posdatas -al estilo del periodista Juan José Rodríguez Medina, principal asesor y operador mediático-, Horacio añade la primera para casos en los que hay personas que se incorporaron al gabinete corrupto de Victoriano Huerta y sus familias lo siguen lamentando por los siglos de los siglos.
La segunda posdata se refiere a un diputado que le reveló que en 1968 no hubo ni un solo pronunciamiento de diputados de la república para alzar la voz en protesta por la toma por asalto de la Ciudad Universitaria, a manos del ejército, y fue así como se perdió la poca reserva de la autoridad moral de la república.
En la posdata tres, Sánchez Unzueta refiere que la memoria e inteligencia colectiva de los potosinos no olvida ni olvidará lo que hoy estamos atestiguando en San Luis Potosí con vergüenza, y advirtió que el silencio suele ser también complicidad.
