Los Expedientes del Imperio

Por Jaime Contreras Huerta

Ni de derecha ni de izquierda, sino todo lo contrario

El movimiento político emergente, "Somos México", que pretende convertirse en un partido político, ha suscitado diversas críticas, en su mayoría, relacionadas con las figuras políticas que lo conforman, ya que se trata de "los mismos de siempre" que provienen de los partidos tradicionales, como el PAN y PRD. Los críticos consideran que el movimiento tiene escasas posibilidades de convertirse en un verdadero contra peso al gobierno federal, ya que su formación podría ser más una estrategia política que un esfuerzo genuino por representar los intereses ciudadanos.

 

La creación de "Somos México", que no son “ni de derecha ni de izquierda”, se da en un contexto donde al menos 28 organizaciones civiles, que buscan participar en las elecciones intermedias de 2027, han solicitado su registro como partidos políticos en el Instituto Nacional Electoral (INE). Esto advierte una posible fragmentación del sistema político y la posibilidad de que partidos sin una base sólida logren obtener representación.

 

Además de "Somos México", otras de las principales organizaciones que buscan registrarse como partidos políticos son: Viva México, liderada por el actor Eduardo Verástegui. Se trata de una organización de ultraderecha que promueve una agenda conservadora oponiéndose al aborto y al matrimonio igualitario. Otra es, la del Partido México Republicano, con ideales identificados con el conservadurismo pronorteamericano. La encabeza Juan Iván Peña Neder, quien ha sido vinculado a grupos neonazis en México y se le ha señalado por haber promovido ideologías extremistas, incluyendo la supremacía aria. Una más es la de México Nuevo Paz y Futuro, lidereada por Ulises, Ruiz, expriista y exgobernador de Oaxaca, cuya carrera ha estado marcada por acusaciones de corrupción.

 

Este escenario generó percepciones de que el surgimiento de estas organizaciones puede intensificar la polarización existente entre los partidos tradicionales y que la llegada de partidos de ultraderecha puede fragmentar aún más el espectro político, generando tensiones entre diferentes facciones. Un partido de ultraderecha podría introducir temas que actualmente no están en el centro del debate político, como posturas más extremas sobre derechos reproductivos, inmigración y políticas sociales.

 

La presencia de partidos de ultraderecha podría forzar a partidos tradicionales, como el PAN, a configurar posturas más conservadoras. Esto ya se ha visto con algunos miembros del PAN que han coqueteado con la ultraderecha, pero cabe señalar que México tiene una historia política que ha limitado el ascenso de la ultraderecha, ya que la ciudadanía mexicana actual tiene a identificarse más hacia los valores liberales y progresistas, lo que podría actuar como un freno ante el avance de posturas extremas.

Los de ultraderecha, como Eduardo Verástegui, utilizan lemas provocativos y narrativas que exaltan los valores tradicionales y religiosos. Por ejemplo, el uso del lema “derechita cobarde” busca criticar a partidos tradicionales como el PAN, posicionándose como una alternativa más audaz y auténtica o extremista.

 

El uso de plataformas digitales es clave en los partidos de ultraderecha para segmentar y geolocalizar electores. Esto permite que la difusión de mensajes personalizados llegue con fuerza a grupos específicos de segmentos más jóvenes y vulnerables a ideas radicales. La estrategia incluye creación de contenido atractivo que pueda ser compartido ampliamente en redes sociales. También recurren a tácticas como la organización de eventos y conferencias, por ejemplo, la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) con la finalidad de reunir a figuras ultraderechistas y generar un sentido de comunidad y apoyo mutuo, además de atraer la atención mediática para legitimar sus propuestas política.

 

Algunos críticos han vinculado a "Somos México" con organizaciones políticas de ultraderecha, lo que ha generado inquietudes sobre sus verdaderas intenciones y su alineación ideológica. Esta organización emergió del Frente Cívico Nacional y con el movimiento de la Marea Rosa en México, que surgió como una respuesta ciudadana en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE), y que enfrentó fuertes críticas por su aparente falta de independencia respecto a los partidos políticos, como el PAN, que tuvo un papel significativo en la organización de las marchas rosas.

 

En su primer spot de propaganda expresan que no son “ni de derecha ni de izquierda”, lo cual connota la idea de que niegan la pertenencia a la derecha o a la izquierda, que asumen una posición aparentemente neutral o superadora de las polarizaciones políticas. Sin embargo, esta neutralidad es ambigua, ya que todas las posturas políticas implican valores e intereses específicos. El uso de “su ideología es México" no describe una ideología concreta, sino que lo convierte en un significante vacío. Desde un enfoque crítico, la frase podría interpretarse como un recurso retórico que despolitiza el debate público. Presentar a México como ideología disfraza las decisiones políticas concretas y las luchas de poder inherentes al sistema democrático. Implícitamente, convierte al partido en el único actor legítimo, al apropiarse de la identidad nacional como un discurso político excluyente. La frase también puede ser interpretada como una estrategia para vaciar de contenido las discusiones ideológicas, al tiempo que otorga al partido el monopolio simbólico de la representación nacional.

 

También dicen: “No somos políticos, somos polifacéticos”. Más bien son políticos metamorfoseados como: Guadalupe Acosta Naranjo (exdiputado del PRD), Gustavo Madero (exlíder y senador del PAN) y Fernando Belaunzarán (exdiputado del PRD), por mencionar algunos, que son polifacéticos porque les encanta vivir a costa del presupuesto de los partidos políticos, del dinero ajeno, son expertos en manipulación y en otras hierbas y ungüentos.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP.

JAIME CONTRERAS HUERTA

jcontrerash44@gmail.com

Maestro en Historia por el colegio de San Luis A.C. y Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.

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