Los Expedientes del Imperio

Por Jaime Contreras Huerta

El proteccionismo de Donald

Cada vez es más evidente que el enfoque proteccionista del gobierno de Donald Trump se manifiesta a través de la imposición de aranceles, la promoción del interés nacional por encima del comercio internacional y la incitación a guerras comerciales que conllevan riesgos significativos para la economía global y las relaciones comerciales internacionales. Los críticos de este enfoque advierten que estas medidas pueden generar efectos adversos como inflación, encarecimiento de productos y falta de competitividad en las industrias nacionales que, al estar protegidas de la competencia extranjera, pueden volverse menos eficientes. Además, las restricciones comerciales pueden generar represalias de otros países, afectando la exportación de bienes y servicios.

El dilema entre apertura económica y proteccionismo sigue siendo un tema central en la política internacional. Mientras algunos gobiernos defienden la necesidad de proteger sus economías en tiempos de crisis, otros apuestan por la globalización y el libre comercio como motores del desarrollo. En estos días, la pregunta que flota en el aire, con el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos con un enfoque proteccionista es: ¿Hasta qué punto está dispuesto a proteger la economía estadounidense sin aislarla del mundo?

En días pasados, diferentes espacios periodísticos publicaron que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) advirtió que el aumento del proteccionismo, especialmente por parte de economías grandes como Estados Unidos, tiene efectos en cadena que pueden debilitar el comercio internacional. “Esto puede resultar en represalias comerciales y un ciclo de medidas proteccionistas que afectan aún más a la economía global. Un estudio reciente estimó que las medidas estadounidenses y sus contramedidas podrían costar más de 2,1 billones de dólares hasta 2029”.

El enfoque proteccionista de Donald Trump representa un riesgo significativo para las economías de México y Canadá. La incertidumbre generada por estas políticas ya provocó una escalada en las tensiones comerciales entre estos países por las posible s consecuencias económicas. En el caso de México, con un arancel del 25%, que impuso Trump, podría resultar en una reducción del del PIB mexicano, es decir puede disminuir la cantidad total de dinero que el país produce en un tiempo determinado, generalmente en un año, ya que muchas empresas mexicanas dependen de las relaciones comerciales con Estados Unidos, especialmente en el sector automotriz, ya que el 80% de los automóviles fabricados en México son exportados a Estados Unidos por lo que el incremento a los aranceles puede afectar la rentabilidad de empresas como General Motors y Ford, con impactos significativos en sus ganancias.

En México están instaladas 21 plantas armadoras de vehículos, 10 más producen motores y otras siete manufacturan transmisiones. De acuerdo con información de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y de la Industria Nacional de Autopartes (INA), estos sitios se distribuyen en “12 entidades de la República Mexicana y son claves en el posicionamiento de la industria automotriz como el primer generador de divisas en México, así como en la contribución del 32% de las exportaciones manufactureras totales que salen del país. La industria automotriz mexicana se ubica además como la séptima fabricante de vehículos en el mundo y la primera en América Latina”.

Con el escenario de incertidumbre debido a la estrategia arancelaria de Trump, es viable considerar que el plan B del gobierno federal se puso en marcha con un acuerdo, desde luego no escrito entre México y Canadá para implementar acciones conjuntas para aminorar riesgos provocados por las Imposiciones de Donald Trump. La presidenta Claudia Sheinbaum, anunció que su gobierno tomará "medidas arancelarias y no arancelarias" en respuesta a los aranceles estadounidenses. Señaló que estas acciones buscan proteger los intereses económicos de México. Además, rechazó las acusaciones de la Casa Blanca sobre vínculos del gobierno mexicano con organizaciones criminales, calificándolas de "calumnia" y reafirmando la soberanía del país. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, también anunció que Canadá impondrá aranceles equivalentes del 25% sobre productos estadounidenses por un valor aproximado de 30,000 millones de dólares e indicado que se implementará una segunda ola de aranceles sobre productos adicionales por valor de 125,000 millones de dólares.

El proteccionismo comercial, especialmente el incremento de aranceles, por parte de economías de primer mundo como Estados Unidos, ha llevado a muchos países a diseñar estrategias alternativas para aminorar sus efectos negativos. La historia nos ha enseñado que, ante imposiciones arancelarias, los gobiernos afectados recurren a estrategias no arancelarias para mantener el acceso a mercados estratégicos sin recurrir a represalias directas que podrían derivar en guerras comerciales prolongadas.

Los especialistas en el tema sostienen que los países afectados por aranceles que imponen economías desarrolladas pueden buscar diversificar sus mercados y reducir su dependencia de un solo socio comercial. Por ejemplo, “México y el T-MEC: Tras las amenazas de Donald Trump de imponer aranceles al acero y al aluminio mexicano en 2018, México fortaleció su red de acuerdos comerciales, incluyendo la consolidación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y el Acuerdo Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP), lo que le permitió tener acceso preferencial a mercados asiáticos.

A pesar de la situación tensa con Estados Unidos, en una encuesta realizada por Enkoll, la aprobación de Claudia Sheinbaum se mantiene alta, aproximadamente el 80%. Esto refleja un apoyo significativo hacia su gobierno, que se ha visto fortalecido por políticas sociales. Un 75% de los encuestados mostró confianza en que Sheinbaum manejará adecuadamente la situación con Trump. Esto sugiere que muchos mexicanos ven en su respuesta una oportunidad para proyectar una imagen de solidez y seriedad en el manejo de relaciones exteriores.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP.

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