EL VATICANO INFORMA QUE HAY UNA "MEJORÍA LEVE" EN LA SALUD DEL PAPA FRANCISCO, PERO AÚN NO ESTÁ FUERA DE PELIGRO; SHEINBAUM LE DESEÓ UNA PRONTA RECUPERACIÓN 

El Papa Francisco experimentó una “leve mejoría” en las últimas horas pero no está aún fuera de peligro y requiere de oxigenación, ya que perdió parte de su pulmón izquierdo por la infección qu padece, aunque la insuficiencia renal que padece el pontífice argentino “no es preocupante”, informó el Vaticano en su parte médico de hoy lunes 24 de febrero.

En su conferencia mañanera, la presidenta Claudia Sheinbaum deseó una pronta recuperación al Papa Francisco luego de que el Vaticano anunciara que estaba grave de salud al ser internado por un problema pulmonar en la Santa Sede. Este deseo lo replicó la mandataria federal en un mensaje que difundió través de redes sociales en el que destacó que el  líder religioso ha sido un "gran humanista que ha optado por los más pobres"

El Vaticano detalló que las condiciones clínicas del Santo Padre, en su estado crítico, demuestran una "leve mejoría". Tampoco en la jornada de hoy se han verificado episodios de crisis respiratorias asmáticas. "Algunos exámenes del laboratorio han mejorado”, indica el parte de esta tarde que agrega que "el control de la 'leve' insuficiencia renal detectada el día anterior no suscita preocupación”.

El Papa Francisco continúa con la terapia de oxígeno, pero con flujos a un porcentaje “levemente reducidos” a los días anteriores. Los médicos, a tenor de la complejidad de su cuadro clínico y de forma prudencial, prefieren mantener el pronóstico reservado.

Esta mañana, Francisco ha recibido la Eucaristía en el Hospital Gemelli de Roma mientras que en la tarde “ha retomado su actividad laboral”. Por la tarde, volvió a llamar telefónicamente al párroco de la Franja de Gaza para expresarle su “paterna cercanía”.

El Papa Francisco “agradece a todo el pueblo de Dios que en estos días se ha unido para rezar por su salud”, termina el comunicado.

Francisco, de 88 años, fue hospitalizado el pasado 14 de febrero por una bronquitis con infección polimicrobiana a la que se sumó una neumonía bilateral.

Lo último que se sabía de su estado es que la pasada noche, la décima ingresado, había transcurrido “bien”, había dormido y que, por la mañana, su humor era “bueno” y “se alimenta con normalidad”.

Esto después del parte del pasado sábado, cuando el Vaticano avanzó que su estado de salud se había agravado, al encontrarse en fase “crítica”, tras sufrir una crisis respiratoria asmática por la que habían tenido que suministrarle “altos flujos” de oxígeno.