La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) advirtió que la imposición de aranceles del 25 por ciento a productos mexicanos y canadienses por parte del gobierno de Estados Unidos podría desencadenar una recesión económica en México y generar presiones inflacionarias en ambos países.  

En un comunicado, el organismo empresarial señala que la aplicación de estos aranceles podría llevar a México a una recesión económica, con un tipo de cambio que superaría los 22 pesos por dólar. Esto incrementará los costos para las empresas y reduciría el poder adquisitivo de las familias mexicanas.  

Por otro lado, Estados Unidos no saldría ileso. La medida generaría presiones inflacionarias que afectarían directamente a los consumidores estadounidenses, encareciendo productos importados desde México.  

“Los aranceles del 25 por ciento violan el T-MEC y debilitan la integración regional. Esto provocaría una recesión en México”, dijo el organismo.

La imposición de aranceles, junto con la aplicación de medidas recíprocas a productos agrícolas a partir del 2 de abril, representa un retroceso en la relación comercial entre ambos países. Coparmex calificó esta acción como un golpe a la competitividad de Norteamérica y una fuente de incertidumbre económica.  

“Estas medidas violan el T-MEC y amenazan la integración norteamericana. Es fundamental que cualquier decisión en este sentido se tome con base en un análisis riguroso, evitando daños colaterales a la industria y a los consumidores de los tres países”, subrayó el organismo.  

A nivel político, la decisión de imponer aranceles también impone presiones adicionales a México en materia de seguridad y migración, temas que han sido utilizados como condicionantes en la relación comercial.

Coparmex urgió al gobierno mexicano a adoptar una postura firme y a utilizar los mecanismos establecidos en el T-MEC para impugnar esta medida.  

Ante este escenario, el organismo empresarial hizo un llamado al gobierno federal para diversificar mercados y reducir la dependencia de un solo país: “Es crucial fortalecer la competitividad de las empresas mexicanas en los mercados internacionales”.

Además, destacó la importancia de la colaboración público-privada para garantizar un entorno estable que atraiga inversiones y promueva el crecimiento económico: “Mientras las empresas impulsan la innovación y la generación de empleo, el gobierno debe garantizar estabilidad, infraestructura y un marco regulatorio eficiente”, finalizó.