Torre Cultural

Por Pedro Félix Gutiérrez 

Magnicidas Potosinos

La historia esa genial y laberinto a señora nos recuerda a José de León Toral, nacido en Matehuala, el asesino del General Álvaro Obregón en el restaurante "La Bombilla".

También nos trae a la memoria a Daniel Flores. nacido en 1906 en Charcas, San Luis Potosí. Él estudió en colegio de religión en Matehuala. En el mercado atendía un puesto de ropa y zapatos para mantenerse. Se afilió al vasconcelismo y escuchó decir al hermano del Padre Romo -su mentor- que si Ortiz Rubio muriera, Vasconcelos ascendería a la Presidencia.

El día dos de febrero llegó a la Capital del país. Se hospedó en el cuarto 18 del "Hotel Colonia" ubicado en Sullivan. El día tres se cortó el pelo y se compró un sombrero fino marca Tardan y un traje negro de 25 pesos. En el centro mercantil adquirió una pistola en la armería "Quintana" y pagó con centenarios.

Paseó por Chapultepec y comió en el mirador. El día cinco desayunó temprano en los puestos al lado de la Basílica de Guadalupe en donde entró, rezó y compró objetos religiosos que llevó a su hotel.

Afuera de Palacio de Gobierno esperó a que terminara la ceremonia oficial con el presidente adentro. Vio el coche y sacó la pistola. En vez de subirse al estribo como lo hacían los terroristas del 900, disparó seis tiros a la parte trasera del vehículo. Dos motociclistas lo detuvieron y se lo llevaron preso a Palacio Nacional.

Una bala siguió su trayectoria, rizó la cabeza de la señora Ortiz Rubio cubierta con un sombrero casquete y rebotó para incrustarse en la mandíbula de don Pascual. La herida destruyó moral y políticamente a Ortiz Rubio, provocó el exterminio del vasconcelismo y llenó de tragedia familiar y personal al autor del atentado.

Daniel Flores fue hallado muerto en su celda enfermo de pulmonía. Lo sacaban al patio a bañarlo con agua helada. El 28 de octubre fueron hallados asesinados sus dos hermanos en Charcas.

Para ahondar en el misterio se supo también que un íntimo amigo de Daniel era a su vez amigo de León Toral y que en Charcas vivía doña Edwiges de León, tía del "magnicida de La Bombilla".

Desde ser un obscuro embajador en Brasil, ingeniero y General, Pascual Ortiz Rubio fue impuesto por Plutarco Elías Calles.  Nunca aceptó incluir en su gabinete a los potosinos Saturnino Cedillo y Gonzalo N. Santos. El jefe del Maximato lo manejaba todo.

En los versos de Salvador Novo se lee:

Logré la bala asnicida

(no por perdida ganada

ni por perdida ganada)
debilitar la quijada
para atenuar la mordida.

Alvaro Obregón fue criollo de segunda generación, nos cuenta José Emilio Pacheco, nieto de inmigrantes campesinos a quienes la injusticia española llevó a los desiertos mexicanos.

Al llegar al poder después de exitosos cinco mil kilómetros en campaña militar, Obregón perfeccionó el presidencialismo mexicano: Tres poderes distintos y un sólo dios verdadero.

A usted le dijo el periodista Vicente Blanco "lo han acusado de ladrón" y contestó: "¡Que soy algo ladrón! ¡Aquí todos los políticos somos ladrones, pero yo no tengo más que una mano! Soy manco mientras que mis adversarios tienen dos. La gente me quiere porque no puedo robar tanto como ellos", ese era el cinismo de un hombre inteligente, memorioso y burlón.

La purga que realizó empezó matando a Benjamin Hill, fusiló a Murguía, mandó matar a Pancho Villa y ahogar a Lucio Blanco. Una copia en su tiempo lo describe:

Si con una sola mano
A tantos ha asesinado
Con dos hubiera dejado
Vacío el suelo mexicano.

En un estilo que podría llamarse "Keops Chafa" está el monumento en el restaurante Cabañas donde Obregón fue asesinado en 1928. En su núcleo está el frasco con formol que contiene su brazo derecho.

Una conspiración entre el padre Miguel Agustín Pro, la madre Conchita y León Toral, quien aparentando ser pintor y dibujante, se acercó a Obregón por la espalda para enseñarle los bocetos que le hacía. Mientras Obregón Salido los veía, el sicario le disparó dos tiros en la cabeza. De este cadáver y asesinato de levantó el PRI. Una época terminaba en "La Bombilla".

Ver y enseñar a ver para dejar atrás la infancia espiritual.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP

Pedro Félix Gutiérrez

pfelix2000@hotmail.com

X: @pedrofelixgutie

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Es académico investigador por la UASLP la cual ha publicado sus libros es considerado buen escritor y poeta sus columnas periodísticas son culturales

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